jueves, 20 de enero de 2011

¿A quien sirve el Cardenal?

Norberto Rivera desde hace ya algun tiempo ha mostrado tener un caracter pendenciero y agresivo, nada adecuado a su investidura de Cardenal catolico, su comportamiento tan extraño me ha impulsado a hacer un estudio profundo de la virtudes y los pecados.

Los siete pecados capitales, fueron mencionados por Santo Tomas de Aquino y San Gregorio Magno y son los siguientes:

  1. Lujuria
  2. Ira
  3. Avaricia
  4. Codicia
  5. Soberbia
  6. Gula
  7. Pereza
Y son opuestos a las virtudes catolicas, las cuales, estan ya tan abandonadas que es necesario explicarlas con cierto detalle, las virtudes son:
  1. Castidad, Moderacion y regulacion del placer sexual.
  2. Paciencia, Actitud para sobrellevar cualquier dificuiltad
  3. Caridad, empatia con los demas, amistad al ser humano.
  4. Generosidad, Hábito de dar y entender a los demás.
  5. Humildad, Es la característica que define a una persona modesta, alguien que no se cree mejor o más importante que los demás en ningún aspecto; es la ausencia de soberbia.
  6. Templanza, Moderación en la atracción de los placeres y procura el equilibrio en el uso de los bienes creados. Asegura el dominio de la voluntad sobre los instintos y mantiene los deseos en los límites de la honestidad.
  7. Diligencia, Es el esmero y el cuidado en ejecutar algo. Como toda virtud se trabaja, netamente poniéndola en práctica; significa cumplir con los compromisos, no ser inactivo, no caer en la pereza, proponerse metas fijas y cumplirlas en su tiempo, poner entusiasmo en las acciones que se realizan.
Asi las virtudes engendran el bien y los pecados generan el mal, la mentira, la violencia y otros actos negativos del ser humano siempre surgen de los pecados.

Ahora veamos que tan bien cumple el Cardenal con los preceptos catolicos basicos:

  1. LUJURIA, El Cardenal ha protegido y ayudado a sacerdotes acusados de Violacion de niños, el mismo ha sido señalado de perpetrar tan abominables actos.
  2. IRA, De eso nos ha dado muchas muestras, en diferentes ocasiones, basta recordar la legalizacion de las leyes de Convivencia en el DF, a las cuales difamo, llamandolas Leyes Gay (su odio a esa comunidad bastaria para demostrar esto), pero que en realidad cubren y amparan a mucha mas poblacion que solo a esa comunidad, de la Ira se genero la mentira y la violencia. Su organo oficial, Desde la Fe, se ha convertido en un pasquin picapleitos, mas digno de un agente provocador comunista que de un semanario catolico lleno de amor y comprension.
  3. AVARICIA, La adquisicion de riquezas, es ofensiva ante tanta pobreza, sus vestimentas de hilo de oro, su baculo de oro macizo, sus limusinas, ¿necesito decir mas?
  4. CODICIA, El Cardenal, codicia el poder politico, todos los que lo vemos y oimos decir que haria si fuera el gobernante del DF.
  5. SOBERBIA, Basta verlo y oirlo, el se cree superior a todos los demas, en particular los que no se someten a sus opiniones, pone en detrimento a todos.
  6. GULA, Basta ver su redonda figura, para darse cuenta de su gusto por la comida.
  7. PEREZA, el Cardenal esta tan obsesionado con la posesion del poder y tan esclavizado de la Violencia, que ha abandonado sus deberes pastorales, las sectas y otras religiones estan prosperando por todas partes, cada dia hay menos catolicos creyentes, las iglesias estan mas vacias, la fe se pierde.
Asi que de acuerdo a los padres de la Iglesia Catolica, nuestro Cardenal Norberto Ribera, cumple los siete pecados capitales, y los ejercita cada semana, y si hay algo ausente de sus actos, (no de sus palabras, que han aprendido el vicio de la mentira), son las virtudes catolicas, pierde la paciencia con suma facilidad, y en su mirada se ve el odio, profundo y sincero...

Asi que solo queda una conclusion posible:

El Cardenal Norberto Ribera sirve a Satanas.

Por lo que en estos tiempos de pobreza y violencia, es mejor regresar a las enseñanzas de nuestros abuelos, rezar nuestras oraciones en privado, seguir una vida buena, intentado alcanzar las siete virtudes y no confiar en la Iglesia Catolica.